Sobre el rol y el espacio Euclídeo. 

Fruto de una conversación con un amigo, me surge la necesidad de hacer esta entrada.

Una de nuestra premisas a la hora de definir y caracterizar el rol ha sido que en el rol se genera una historia.

El cómo se genera esta historia y qué grado de participación en la misma tienen los jugadores, nos podría servir para compararlo con, permitidme la expresión, otros “medios narrativos”.

Cine o literatura
- La primera dimensión la podrían constituir el cine o la literatura, dos formatos para una misma forma de participar o disfrutar de un determinado medio narrativo. La evolución de la historia es lineal, y la participación consiste en el avance con la historia. En ellos  se favorece que los lectores o espectadores, se identifiquen con los personajes o protagonistas principales de la historia para transmitirles los sentimientos o situaciones a los que se ven expuestos, se genera un vínculo de empatía o identidad con los personajes, pero la participación en la historia es muy limitada. La participación consiste en avanzar con la historia e imbuirse plenamente en ella, o abandonarla.

Es por ello que uno de los principales recursos literarios, consiste en la vinculación del lector con el personaje principal de la historia.

Pero el lector toma una única decisión en la historia, seguir leyendo, o abandonar. Su toma de decisiones es lineal 

Videojuegos

- La segunda dimensión podría representarla los videojuegos. En muchos de ellos, principalmente en los catalogados como rpg,(fruto de la extracción de instrumentos traídos de los juegos de rol) el jugador toma decisiones en la elección de las características del personaje, y en la acciones que estos realizan. Pero estas decisiones son finitas y limitadas, los diálogos son dirigidos, las acciones o motivaciones, son aspectos programados y arboles causales bastante finitos. Tanto es así que cada vez son más frecuentes las cinemáticas dirigidas a romper la continuidad de las acciones que pueden llegar a resultar repetitivas, o a la cada vez mas exitosas partidas multijugador, fruto de la necesidad de transmitir al jugador un mayor abanico de interacción y respuestas del entorno y sus participantes.

El jugador no so decide si sigue jugando o si para, sino si escoge entre las n variables que le permite la plataforma de juego

Juegos de rol

- El rol supone, bajo mi punto de vista, de la cuarta a la n dimensión en la toma de decisiones.
El jugador puede llegar a involucrarse en la creación del personaje con un grado detalle casi infinito; nacimiento, infancia, adolescencia, aptitudes físicas, habilidades, conocimientos, motivaciones personales, conducta, ajuste personal, traumas, posición social, experiencia, bagaje, etc.

Los límites de interacción y decisión con el medio son muy abiertos, y únicamente limitados por su imaginación, el contrato social que se establece en la mesa, y la coherencia de la partida.

El jugador no tiene que decidir entre una serie de elementos finitos, de ahí que si hay algo que caracterice al rol es la siguiente expresión.

El jugador puede subir, bajar, agacharse, saltar…. pero también llorar, soñar, engañar, sufrir, envidiar, añorar, desear, etc.

La toma de decisiones del personaje va a estar condicionada por sus actitudes físicas, por su conocimiento, su cansancio, pasado, presente, expectativas de futuro, su posición frente al grupo, su necesidad de aparentar, su ajuste personal frente a la situación, miedo, pasión, ira, etc. Y frente a las decisiones de otros personajes y su ascendencia sobre los mismos, o los resultados y consecuencias que se produzcan.
En el rol por tanto, se producen n variables de una geometría no necesariamente plana, y es por ello que se me antoja incluso con potencial para permanecer fuera del espacio euclideo.

¿Y qué interés tiene todo esto?

He asistido a buenas partidas que han sido una interesante historia  definida y narrada por el director de juego.

Igualmente he asistido a buenas partidas donde los personajes han vencido inumerables ordas de enemigos en batallas imposibles.

Pero es necesario que conozcamos la naturaleza del rol y su potencial para que entendamos donde están sus límites. El rol no es solo eso. Es eso y puede ser mucho más.

Entiendo necesario que esta ida de olla que es este artículo, que lo es, cale en el tuétano de los jugadores habituales para que tus partidas de rol no solo se conviertan en la asistencia a que te cuenten una historia como en un libro, o en una película, o a la gestión de variables finitas como en un juego de mesa o videojuego.

El rol no es solo un juego en el que nos cuentan historias, o son estupendas partidas de Diablo.

Al menos que tengamos siempre presente, que permite más, mucho más.

Y creo necesario que seamos capaces de entender y conocer su naturaleza, para que seamos capaces de exprimirlo y llegar allí donde no podemos llegar con otros medios narrativos.
Y es que circular con un avión por una pista puede ser muy divertido, pero despegar y volar debe de ser la leche.

Nota. Imagino que al lector al acabar estas líneas le puede asaltar una duda.

Si el rol es tan potente, ¿Por qué no está más extendido? ¿Por qué no se juega más? ¿por qué está relegado a un sector menor de adolescentes, y a viejunos nostálgicos? ¿Porqué tiene tan mala prensa?

La respuesta creo que es clara. Porque la libertad, es tremendamente exigente, pero eso por no cargar,será en otra entrada.